lunes, 9 de abril de 2012

MI INTERIOR

Me invade un sentimiento de frustración cada vez que actúo en pro de alguien. 


Sé que no voy a recibir la misma respuesta, la misma preocupación, el mismo cariño...jamás.
Si lo he recibido, he pensado que era siempre una broma. O incluso un lapsus mental del otro sujeto.


Nada de lo que hago, lo hago por postura, me sale natural.


Pero una vez me han ignorado e infravalorado, no tengo fuerzas para coger mi orgullo y salir adelante.
Se me agotan las fuerzas.


Sé que mucha gente en mi situación debe sentirse orgullosa y valorada, pero no siento nada. Ni un apoyo por parte de nadie.


La pirámide de Maslow no esta completa para mí.


Y me da pena.


Estoy harta de estar en la sombra y alentar y ayudar a la gente.


¿Acaso yo no merezco lo mismo?
¿Acaso yo no merezco que me den un abrazo alguna vez y me escuchen hablar de mis logros, de mis tonterías, que me presten atención como el resto de mortales?


Si yo hago un esfuerzo ¿por qué la gente no? No quiere?
¿Tan vaga es la sociedad?
¿Tantas Glorias hay por el mundo, aburridas, sosas e insignificantes?


Qué fácil es manipular a la sociedad pues.


Sí, eso es! Me haré manipuladora profesional... le haré la pelota a todo el mundo mientras construyo mi imperio.


Nadie podrá decir que no he cumplido. Nadie podrá sentirse menospreciado a mi alrededor. Todos serán buenos a mis ojos.


Y un día, cuando despertéis...el mundo será mío.